Ricky no termina el partido.

En la última noche de NBA el partido de los Minnesota Timberwolves se cerró con un buen y mal sabor de boca; bueno en el aspecto de que los Timberwolves se impusieron a los Hawks de Atlanta 95-99. Y en la otra cara de la moneda está el mal sabor de boca que deja el agravamiento de la lesión de Ricky Rubio. El lunes, Ricky, se torció el tobillo en el encuentro ante los Philadelphia 76ers, en su momento no era nada de lo que preocuparse aparentemente, pero sí ha resultado preocupante, ya que en el partido contra los Hawks lo tuvo que dejar a los 21 minutos de juego, realizando solamente 5pts 6 rebotes y 3 rebotes. En su lugar entró al encuentro Zach Lavine, que realizó 18 tantos 6 asistencias y 5 rebotes.
El español cree poder llegar al partido en plenas condiciones de disputar el partido tras descansar un día.

El factor que ha provocado los problemas en el tobillo de Ricky fue una torcedura en el tobillo que le dejó disputar solamente 22 partidos la última temporada.